Escándalo de la testigo falsa
En la jornada de ayer, la primera mandataria del país presentó el
informe sobre tierras extranjerizadas, ocasión en la que aprovechó para -como
es habitual- hablar de varios temas de la coyuntura política
Sin
embargo, ayer la mandataria sorprendió cuando en medio de su alocución trajo a
colación la controversia generada a nivel nacional con la posible participación
del diputado radical Eduardo Costa en el presunto delito de “Obstrucción a la Justicia ”, en el marco
del caso por el asesinato de Ángeles Rawson.
La semana pasada, el matutino Página 12 publicó que la testigo trucha del caso Ángeles Rawson, una vecina caletense identificada como Beatriz Incolaza Fuentes, admitió que se comunicó con la oficina del diputado Eduardo Costa antes de brindar una versión mentirosa de la muerte de la joven a Canal 13 y TN. El juez cree que el empresario tuvo la intención política de involucrar al Gobierno nacional y que la mujer habría recibido dinero de Costa para mentir.
El juez que investiga a la testigo falsa que fue “plantada” en el caso Ángeles fijó desde entonces la mirada sobre el empresario, a cuya oficina dijo haberse comunicado la testigo falsa, dejando entrever la posibilidad de que el empresario le haya pagado para dar un falso testimonio con el que se intentó embarrar la causa.
Esto provocó que el ministro de Justicia, Julio Alak, presentara ayer una solicitud antela
Procuración General de la Nación para que «se investigue el intento de
obstrucción a la Justicia
por parte de la presunta testigo Beatriz Fuentes y del diputado de la UCR de Santa Cruz, Eduardo
Costa”.
En este sentido,la Presidenta
reverenció ayer que: “El otro día, cuando me enteraba también de un caso que
conmocionó y sigue conmocionando a la opinión pública, que habían ‘plantado’
una prueba y todo un edificio fue citado por un juez para ser testimonio por
alguien que había puesto una grabación, y luego nos venimos a enterar cómo
había sido llegada esta grabación por un Diputado de la oposición”, fue lo que
dijo la mandataria haciendo clara referencia a Costa, y agregando que “yo digo,
hay límites para todo, es legítimo pelear en política, discutir, debatir,
querer ocupar el lugar del otro, pero por favor para hacerlo utilizar los
instrumentos legítimos, válidos y maravillosos que tiene la actividad política,
del debate del argumento, del ser mejor que el otro o por lo menos convencer a
la sociedad de que vos sos mejor que el otro, pero nunca recurrir a este tipo
de prácticas”. prensa libre online
La semana pasada, el matutino Página 12 publicó que la testigo trucha del caso Ángeles Rawson, una vecina caletense identificada como Beatriz Incolaza Fuentes, admitió que se comunicó con la oficina del diputado Eduardo Costa antes de brindar una versión mentirosa de la muerte de la joven a Canal 13 y TN. El juez cree que el empresario tuvo la intención política de involucrar al Gobierno nacional y que la mujer habría recibido dinero de Costa para mentir.
El juez que investiga a la testigo falsa que fue “plantada” en el caso Ángeles fijó desde entonces la mirada sobre el empresario, a cuya oficina dijo haberse comunicado la testigo falsa, dejando entrever la posibilidad de que el empresario le haya pagado para dar un falso testimonio con el que se intentó embarrar la causa.
Esto provocó que el ministro de Justicia, Julio Alak, presentara ayer una solicitud ante
En este sentido,
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